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14 octubre 2022.- La idea de los probióticos y prebióticos como parte de una rutina de bienestar ha ganado popularidad recientemente. Internet y las plataformas de redes sociales comparten una gran cantidad de afirmaciones sobre los beneficios de su consumo; sin embargo, muchas afirmaciones requieren un ojo perspicaz con respecto a la evidencia científica.
De hecho, un estudio publicado en Frontiers in Medicine analizó 150 páginas web pobladas por Google para el término de búsqueda de palabras clave "probióticos" y concluyó que solo el 35% citó literatura científica.
Los probióticos tienen una larga historia ; incluso las personas en la antigüedad consumían leche fermentada por sus beneficios para la salud. La OMS define a los probióticos como “microorganismos vivos que, cuando se administran en cantidades adecuadas, confieren un beneficio para la salud del huésped”.
Por otro lado, los prebióticos son compuestos de los alimentos cuya función es ayudar al crecimiento y actividad de la microbiota intestinal.
INFLUENCIA DEL MICROBIOMA INTESTINAL EN LA INMUNIDAD
El estado de nuestro microbioma intestinal (la comunidad de microorganismos que viven en nuestro tracto digestivo) juega un papel importante al influir en el estado de nuestro sistema inmunológico [ 1 ] [ 2 ]. También hay diferencias en la composición del microbioma de quienes viven con autoinmunidad.
¿ES POSIBLE QUE LOS PROBIÓTICOS Y PREBIÓTICOS ALTEREN LA COMPOSICIÓN DEL MICROBIOMA PARA BENEFICIAR A QUIENES VIVEN CON AUTOINMUNIDAD?
Se ha documentado que la suplementación dietética con prebióticos y probióticos exhibe un efecto terapéutico. Los microbios beneficiosos en nuestros intestinos pueden inhibir los microbios patógenos, modificar la permeabilidad intestinal e impedir o estimular una respuesta inmunológica.
Los microbios también pueden fermentar prebióticos, como la fibra, y producir moléculas que tienen propiedades antiinflamatorias o pueden inhibir el crecimiento de patógenos [ 3 ]. Si bien los científicos han obtenido información sobre muchas vías moleculares involucradas en estos procesos, todavía están trabajando para definir las cepas que exhiben el mayor potencial terapéutico.
PAPEL DE LOS PROBIÓTICOS Y PREBIÓTICOS EN LAS ENFERMEDADES AUTOINMUNES
El valor terapéutico de los probióticos y prebióticos se ha estudiado en varias enfermedades autoinmunes, con resultados variables.
ARTRITIS REUMATOIDE ( AR )
Si bien algunos estudios anteriores no han mostrado una mejora significativa en la actividad de la enfermedad a partir del tratamiento con probióticos en pacientes con AR, otros sugieren el efecto beneficioso de la suplementación con probióticos en pacientes que consumen Lactobacillus casei , una mezcla de tres bacterias, Lactobacillus acidophilus , Lactobacillus casei y Bifidobacterium bifidum o Bacillus coagulans GBI-30, 6086 , junto con medicamentos antiartríticos.
En otro estudio , los investigadores realizaron un metanálisis de estudios que investigaban la influencia del tratamiento de la microbiota en pacientes con AR. Los autores encontraron que algunos marcadores de enfermedad eran más bajos en pacientes que tomaban probióticos en comparación con el grupo de placebo. Sin embargo, la diferencia en las puntuaciones de actividad de la enfermedad no fue significativa entre los dos grupos. Otro investigador investigó el efecto de los prebióticos en pacientes con AR. Los autores utilizaron suplementos ricos en fibra y observaron una mejora en los marcadores de la enfermedad después de un mes de tratamiento.
ENFERMEDAD INFLAMATORIA INTESTINAL: COLITIS ULCEROSA ( CU ) Y ENFERMEDAD DE CROHN ( EC )
La investigación sobre las personas con colitis ulcerosa se muestra prometedora en el uso de probióticos como opción de tratamiento. Si bien hay estudios que no muestran ningún efecto beneficioso de Escherichia coli Nissle 1917 en pacientes con CU activa, se demostró que E. coli Nissle es eficaz para mantener la remisión al mismo nivel que el tratamiento estándar de oro (mesalazina) en otro estudio.
Múltiples estudios refuerzan los efectos positivos de los probióticos en pacientes con CU. En un estudio, los investigadores encontraron que VSL#3 (un probiótico de ocho cepas que incluye lactobacilos , bifidobacilos y Streptococcus thermophilus ) aumentó significativamente la remisión e impactó positivamente a los pacientes con CU [ 4 ] [ 5 ] [ 6 ]. Este efecto no se observó en la enfermedad de Crohn.
Los pacientes que vivían con colitis ulcerosa también recibieron inulina enriquecida con oligofructosa como prebiótico, lo que redujo significativamente la colitis cuando se tomó en dosis altas. En el estudio, esto condujo a una mayor producción de butirato colónico, un producto bacteriano con propiedades antiinflamatorias y una disminución del marcador inflamatorio fecal calprotectina [ 7 ]. Del mismo modo, los pacientes con colitis ulcerosa que tomaban el alimento de cebada germinada combinado con la medicación farmacéutica de rutina mostraron una reducción significativa en los marcadores de inflamación, dolor abdominal y calambres.
ESCLEROSIS MÚLTIPLE ( EM )
Hay evidencia de estudios con roedores y humanos que sugieren que la microbiota intestinal juega un papel importante en la EM. Un estudio que utilizó modelos de ratones con EM mostró que la introducción de probióticos permitió la modulación de las respuestas inmunitarias, lo que resultó en una disminución de la gravedad de la enfermedad. La investigación también ha respaldado que la alteración del microbioma intestinal puede suprimir el desarrollo de la EM al modificar los componentes del sistema inmunitario. Además, un ensayo clínico en pacientes con EM mostró un impacto positivo en los síntomas y la calidad de vida de los pacientes con EM que tomaban cápsulas probióticas con regularidad.
LUPUS ERITEMATOSO SISTÉMICO ( LES )
En un experimento, se observó que los marcadores del sistema inmunitario de roedores con LES que recibieron Lactobacillus paracasei o Lactobacillus reuteri tuvieron mejoras notables . Si bien el modelo de ratones mostró resultados prometedores, se necesitan más estudios para definir si este tipo de tratamiento tendrá éxito en pacientes con LES.
PUNTOS IMPORTANTES A CONSIDERAR
Los probióticos y los prebióticos son palabras de moda comunes en los medios, a menudo con afirmaciones no verificadas que promueven la salud. Si bien generalmente se considera seguro, hay varios puntos que debe recordar al considerar los probióticos y los prebióticos:
- Los probióticos y los prebióticos son términos genéricos para muchos microorganismos y compuestos. Los hallazgos de los estudios científicos son relevantes solo para los microorganismos o compuestos específicos que se estudian y no significan que todos los probióticos y prebióticos puedan producir el mismo efecto.
- Muchas de las afirmaciones, correlaciones e información presentada en Internet con respecto a los probióticos y prebióticos, especialmente en lo que respecta al control de los síntomas, no están respaldadas por evidencia científica .
- Los probióticos y prebióticos se venden como suplementos y, a menudo , no se someten a las pruebas o estudios rigurosos que se requieren para los medicamentos.
- Los probióticos se consideran seguros para la población general. Sin embargo, dado que las personas con enfermedades autoinmunes a menudo toman medicamentos inmunosupresores, algunos cuestionan si es seguro darles probióticos a esos pacientes.
- Si bien la evidencia sugiere el uso de ciertos probióticos o prebióticos en el tratamiento de enfermedades, la investigación a menudo incluye grupos pequeños. Se necesitan ensayos clínicos más extensos para obtener datos más sólidos.
- No se ha llegado a un consenso sobre el uso de probióticos y prebióticos por parte de la comunidad científica o médica en general. Hasta el momento, no ha habido una terapia aprobada por la FDA que utilice probióticos y las directrices sobre el uso de probióticos y prebióticos no han sido publicadas por instituciones médicas reconocidas o sociedades profesionales.
La ciencia parece estar analizando qué probióticos y prebióticos pueden ayudar potencialmente a los pacientes con enfermedades autoinmunes y qué suplementos pueden dañar o exacerbar los síntomas de las enfermedades autoinmunes.
Antes de utilizar probióticos o prebióticos como tratamiento, es fundamental tomar medidas de seguridad y seleccionar cepas y protocolos óptimos, consultando a un profesional médico.
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