El ADN se desenrolla de las histonas. La estructura 3D del ADN puede influir en qué genes se pueden activar y desactivar. El hallazgo es un ...
El ADN se desenrolla de las histonas. La estructura 3D del ADN puede influir en qué genes se pueden activar y desactivar.
El hallazgo es un punto de inflexión en la investigación del cáncer
01 noviembre 2022.- Dos importantes estudios publicados en Nature han descubierto un nuevo nivel de control de la actividad del gen del cáncer dentro de los tumores, denominado "materia oscura" del cáncer.
La revelación muestra que la epigenética, las células que controlan la actividad de los genes, juegan un papel crucial en el desarrollo del cáncer. Los cánceres generalmente se analizan solo para detectar mutaciones de ADN, lo que puede pasar por alto este nivel de control y, por lo tanto, no puede predecir cómo se comportarán los cánceres y cómo responderán al tratamiento.
El profesor Trevor Graham, director del Centro para la Evolución y el Cáncer del Instituto de Investigación del Cáncer (ICR), dijo en un comunicado :
"Hemos revelado un nivel adicional de control sobre cómo se comportan los cánceres, algo que comparamos con la 'materia oscura' del cáncer. Durante años, nuestra comprensión del cáncer se ha centrado en las mutaciones genéticas que cambian permanentemente el código del ADN, pero nuestra investigación ha demostrado que la forma en que el ADN se pliega puede cambiar qué genes se leen sin alterar el código del ADN y esto puede ser muy importante para determinar cómo se comportan los cánceres".
La investigación fue dirigida por científicos del Instituto de Investigación del Cáncer de Londres, Human Technopole de Milán y la Universidad Queen Mary de Londres.
Los cambios epigenéticos están implicados en la evolución del cáncer
En el primer artículo , los investigadores recolectaron 1373 muestras de 30 cánceres de intestino y observaron los cambios epigenéticos a medida que crecían los cánceres. Sus observaciones mostraron que los cambios epigenéticos son comunes en las células cancerosas, son hereditarios y estaban presentes en las células cancerosas que tenían "ventajas de supervivencia".
El segundo artículo pretendía estudiar por qué las células cancerosas dentro del mismo tumor pueden ser diferentes entre sí. Entonces, los investigadores observaron la secuencia de ADN en diversas muestras tomadas de diferentes partes del mismo tumor. El estudio reveló que menos del dos por ciento de "los cambios en el código de ADN en áreas independientes de un tumor se asociaron con cambios en la actividad de los genes y la variación en las características de las células cancerosas en los tumores a menudo se rige por factores distintos a las mutaciones del ADN".
Con estos estudios, los científicos pudieron rastrear la influencia del control epigenético en el crecimiento y la evolución de los cánceres de intestino. También notaron que los cambios epigenéticos están fuertemente involucrados en la evolución del cáncer.
Las pruebas genéticas para mutaciones del cáncer solo nos brindan una parte de la imagen sobre el cáncer de una persona, y no tienen en cuenta la 'epigenética', cambios en la forma en que se leen los genes. Al probar los cambios genéticos y epigenéticos, podríamos, potencialmente, predecir con mucha más precisión qué tratamientos funcionarán mejor para el cáncer de una persona en particular, dijeron los autores del estudio.
Según la declaración del ICR, los documentos representan un "avance fundamental" en la comprensión mundial del cáncer. Los estudios explican por qué las pruebas de ADN pueden no ser confiables cuando se trata de la respuesta del cáncer al tratamiento. Ahora puede ayudar a los médicos a personalizar mejor los tratamientos para los pacientes.
Por primera vez se han podido mapear los cambios epigenéticos junto con la acumulación de mutaciones de ADN a medida que evoluciona un tumor colorrectal. Esto brinda oportunidades para desarrollar nuevos tratamientos contra el cáncer que no aborden los efectos de las mutaciones de ADN, sino los cambios epigenéticos que determinan cómo se leen los genes.
Los autores del estudio afirman que esta investigación abre interesantes oportunidades futuras para examinar el cáncer empleando "pruebas tanto genéticas como epigenéticas y, finalmente, para tratar el cáncer con medicamentos configurados por la epigenética.
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