EXPOSICIONES. Hasta 8 junio, "Proust y las artes", ambientan el Museo Nacional Thyssen-Bornemisza

exposiciones, Museo Nacional Thyssen-Bornemisza, Proust

Claude Monet. Nenúfares. 1916-1919. Óleo sobre lienzo. 200 x 180 cm. Riehen/Basel, Fondation Beyeler, Beyeler Collection

El Museo Nacional Thyssen-Bornemisza acoge del 4 de marzo al 8 de junio de 2025 una exposición que muestra cómo el arte influyó en la obra del ilustre escritor parisino. Proust es considerado como uno de los escritores más influyentes del siglo XX, quien también destacó en filosofía e historia del arte. Las pinturas, diseños, esculturas y manuscritos exhibidos tienen su reflejo en aspectos de su obra, personalidad y vida.

En su producción literaria se puede observar la influencia de artistas del pasado y de sus contemporáneos, al igual que la recreación de los paisajes y monumentos que le cautivaron en su día, junto al ambiente artístico que vivió. Una época marcada por la renovación en las artes que imprimieron los artistas impresionistas en un París – en el que ya vivía Marcel Proust – moderno y cosmopolita iluminado por la electricidad, en el que los parisinos de desplazaban en coches y llenaban cafés, restaurantes y espectáculos. Es precisamente el ambiente en el que vivió y desarrolló su vida y obra relacionado con las artes el elemento fundamental en el que se basa esta exposición.

La muestra incluye pinturas de Rembrandt, Vermeer, Van Dyck, Watteau, Turner, Fantin Latour, Manet, Monet, Renoir o Whistler, entre otros; una escultura de Antoine Bourdelle; diseños de Mariano Fortuny y de otros creadores de la época; una selección de manuscritos de Proust, con préstamos del Musée du Louvre, el Musée d’Orsay y el Carnavalet - Histoire de París, la Maurithuis de La Haya, el Rijksmuseum de Ámsterdam, el Städel Museum de Fráncfort y la National Gallery of Art de Washington.

Entre las obras expuestas del propio Proust se encuentra Los placeres y los días (1896) -uno de sus primeros libros publicado- en el que ya muestra su gusto por las artes, la música, el teatro, la pintura y las frecuentes visitas al Museo del Louvre que realizaba. Un gusto que también se refleja en su obra posterior como la novela A la busca del tiempo perdido, considerada como una de las obras cumbre de la literatura francesa y universal. Algunos de los escenarios donde transcurren los relatos del narrador como la costa del norte de Francia, el Bois de Boulogne, los Campos Elíseos, o los palacios de del distrito Faubourg Saint-Germain los plasmaron en sus cuadros Manet, Pissarro, Renoir o Monet entre otros grandes pintores de la época.

Las artes escénicas también están presentes en la novela de Proust. Así, el personaje de Berma está basado en las actrices Gabrielle Réjane y Sarah Bernhardt. Esta última está reflejada en la pintura de George Clairin, procedente del museo del Petit Palais de París. Y junto a ellas, otras temáticas importantes en esta exposición presentes en Proust como la Historia del Arte, la ciudad italiana de Venecia, la arquitectura gótica y las catedrales, además de la moda. En este ámbito destacan los trajes y telas del andaluz Mariano Fortuny y Madrazo también exhibidos.

James Tissot. El Círculo de la Rue Royale, 1866. Óleo sobre lienzo, 175 × 281 cm. París, Musée d’Orsay. © Musée d'Orsay, Dist. GrandPalaisRmn / Patrice Schmidt

Ignacio Zuloaga. Retrato de la condesa Mathieu de Noailles, 1913. Óleo sobre lienzo, 152 × 195,5 cm. Bilbao, Museo de Bellas Artes, donación de don Ramón de la Sota y Llano, 1919 © Arte Ederren Bilboko Museoa – Museo de Bellas Artes de Bilbao