Desigualdad y sistemas de protección social en Europa
Los sistemas europeos de protección social difieren considerablemente de un país a otro en envergadura, estructura e impacto en la desigualdad de rentas. El sistema español es más pequeño, se centra más en las prestaciones económicas contributivas y es menos redistributivo que los de otros miembros de la UE.
21 noviembre 2023.- Acometer reformas estructurales poniendo en el centro a los grupos más vulnerables (incluyendo hogares con niños, jóvenes y mujeres) podría contribuir a reducir la desigualdad económica en España –actualmente una de las más elevadas de Europa occidental.
La crisis originada a raíz de la covid-19 ha acentuado la precariedad laboral y podría haber conducido a un incremento de la tasa de desempleo.
En la mayoría de los países europeos, entre ellos España, se han adoptado medidas sin precedentes –ampliación del acceso a los programas sociales y aumento de su dotación– a fin de evitar un incremento de la desigualdad económica a corto plazo. Pero es posible que los efectos regresivos de la crisis en el mercado laboral perduren a largo plazo si no se adoptan otras medidas adecuadas.
Puntos clave
1. En España, el gasto público social representa el 23% del PIB, uno de los niveles más bajos de Europa occidental. Además, está más centrado en las prestaciones económicas contributivas (por ejemplo, pensiones y prestaciones por desempleo), que constituyen el 64% del gasto total, mientras que en la UE-27 esta proporción es del 52%.
2. A diferencia de lo que ocurre en la mayoría de los miembros de la UE, en España una proporción mayor de prestaciones sociales en efectivo va a hogares con rentas más elevadas en detrimento de los hogares con rentas más bajas. Mientras que en la UE la distribución de prestaciones entre los diferentes grupos de renta es bastante uniforme, en España los hogares del quintil con mayores ingresos reciben 1,6 veces más que los del quintil con menores ingresos.
3. España es uno de los países con mayores desigualdades de Europa occidental: la distribución de los ingresos procedentes del mercado es desigual, y la redistribución fiscal y de prestaciones es más bien débil.
4. Sería necesario acometer reformas estructurales para lograr una reducción real de la desigualdad, ya que los pequeños incrementos en las políticas de impuestos y prestaciones solo tendrían un efecto limitado en la redistribución de ingresos.
5. En relación con la renta disponible, el gasto social en España es inferior a las ratios medias de la UE en el caso de los niños (en un 38%), los jóvenes (en un 45%) y las mujeres (en un 16%).
6. Las políticas aplicadas para mitigar las consecuencias económicas de la pandemia de la covid-19 han resultado eficaces para luchar contra la desigualdad económica a corto plazo. Pero es posible que los efectos regresivos de la crisis en el mercado laboral perduren a largo plazo si posteriormente no se adoptan medidas adecuadas.
Porcentaje del total de prestaciones sociales en efectivo recibidas por quintil de renta disponible de los hogares en 2018En España, las prestaciones sociales en efectivo favorecen a los hogares con rentas más elevadas. En Europa, la distribución es más uniforme, ya que las prestaciones contributivas están menos sesgadas y se complementan con prestaciones sujetas a condiciones de recursos y prestaciones universales.
Fuente: Horacio Levy, OCDE (septiembre, 2023)
COMENTARIOS