Los planes europeos de hidrógeno dependen de importaciones inciertas: informe
La mayoría de los países de los que Europa depende para las importaciones no están preparados para aumentar la producción, según muestra un nuevo estudio
16 febrero 2024.- La UE no debería depender de importaciones inciertas para cumplir sus demasiado ambiciosos objetivos de hidrógeno, según muestra un nuevo estudio de seis importantes países exportadores. A pesar del gran revuelo en torno al hidrógeno, sólo el 1% de la producción prevista de hidrógeno verde en los países evaluados ha recibido financiación.
Europa debería centrarse en desarrollar su propio suministro antes de recurrir a países que, en muchos casos, no pueden aumentar rápidamente la producción de hidrógeno y carecen de la infraestructura necesaria para exportar hidrógeno a Europa, dice Transport & Environment (T&E).
Geert Decock, gerente de electricidad y energía de T&E, dijo: “Con los políticos europeos volando por todo el mundo para asegurar acuerdos sobre el hidrógeno, esta es una revisión de la realidad muy necesaria. La mayoría de los países de los que Europa depende para las importaciones no están en absoluto preparados para aumentar la producción”.
El RePowerEU de la UE, decidido apresuradamente tras la invasión rusa de Ucrania, establece planes para producir 20 millones de toneladas de hidrógeno renovable para 2030, la mitad de las cuales provendrá de importaciones. La consultora Ricardo, en nombre de T&E, analizó seis países con grandes planes para exportar hidrógeno a la UE: Noruega, Chile, Egipto, Marruecos, Namibia y Omán. Se estima que estos países combinados solo podrían entregar apenas una cuarta parte de los 10 millones de toneladas de importaciones objetivo de RePower EU.
El análisis de las estrategias nacionales de los seis países indica que la UE es vista como un mercado clave para las exportaciones de hidrógeno. Omán, por ejemplo, espera exportar más de dos tercios de su producción de hidrógeno a la UE en 2030. Pero un desafío importante es que estos países exportadores –muchos de ellos muy dependientes de los combustibles fósiles y con escasez de agua– enfrentan importantes obstáculos para aumentar la producción.
Electricidad limpia
Aparte de Noruega, los otros cinco países tienen actualmente una capacidad limitada de energías renovables. Omán, por ejemplo, depende casi exclusivamente de combustibles fósiles para alimentar su red. Por lo tanto, estos países necesitarán enormes inversiones en generación de electricidad limpia para exportar hidrógeno verde y descarbonizar sus propias redes.
Namibia es el caso más extremo, ya que necesita más de diez veces la demanda de electricidad proyectada para 2030 para satisfacer sus exportaciones de hidrógeno previstas a la UE. Actualmente, la mitad de los namibios no tiene ningún acceso a la electricidad.
Agua
El hidrógeno también requiere cantidades importantes de agua. Se necesitarían entre 55 y 80 millones de toneladas de agua para producir los 2,6 Mt de H2 que se prevé exportar a la UE en 2030, el equivalente a 32.000 piscinas olímpicas cada año. Todos los países analizados, excepto Noruega, enfrentarán una importante escasez de agua en las próximas décadas.
Infraestructura
Actualmente no existe ninguna infraestructura para transportar hidrógeno a largas distancias. Los gasoductos de hidrógeno, por ejemplo hacia el norte de África, tardarían años en construirse. Esto significa que la única forma viable de importar hidrógeno actualmente es en forma de e-combustibles como e-amoníaco, e-metanol y e-queroseno, que pueden transportarse en barcos.
Producción de la UE
Europa podría producir entre 6 y 7,5 millones de toneladas de hidrógeno renovable para 2030 a nivel nacional. Esto sería suficiente para satisfacer las necesidades del continente si limita el suministro de hidrógeno y combustibles electrónicos a sectores que tienen pocas alternativas como el transporte marítimo, la aviación y los fertilizantes.
Según el estudio, los objetivos de hidrógeno de la UE son aproximadamente cinco veces más de lo que realmente se necesitará para alcanzar los objetivos ecológicos del bloque para 2030.
Geert Decock concluyó: “La principal prioridad en este momento es desarrollar un mercado real para el hidrógeno renovable y los electrolizadores en Europa. Se trata de un desafío bastante grande y requerirá un enfoque preciso en aquellos sectores que más necesitan hidrógeno, en particular la aviación y el transporte marítimo. A largo plazo, las importaciones de hidrógeno tendrán que desempeñar un papel más importante, pero hay una serie de condiciones importantes que deben cumplirse para que las importaciones sean sostenibles”.
El estudio muestra que se podrían crear 2 millones de puestos de trabajo en las cadenas de suministro de hidrógeno en la UE de aquí a 2030, según las inversiones ya anunciadas.
Fuente: WEIGHING THE EU’S OPTIONS: IMPORTING VS DOMESTIC. PRODUCTION OF HYDROGEN/E-FUELS. Report for: Transport & Environment. Ricardo ref. ED18118 Issue: 1.3 31 October 2023
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