Nueva tecnología podría acabar con el favor del hidrógeno en la producción de acero ecológico
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| Ingenieros de investigación y desarrollo trabajando en un horno en las instalaciones de Boston Metal en Woburn, Massachusetts. Foto: Boston Globe/Getty |
La electrólisis de óxido fundido puede resultar una opción más barata que la reducción directa de hierro, si la nueva empresa Boston Metal puede demostrar que funciona a escala comercial.
07 marzo 2024.- Durante mucho tiempo se ha sostenido la opinión de que la única forma posible de descarbonizar la producción de acero es utilizar hidrógeno verde para extraer hierro del mineral y luego utilizar hornos de arco eléctrico para convertir el hierro en acero.
Pero una tecnología desarrollada por una nueva empresa bien financiada promete no sólo competir con el hidrógeno verde, sino que potencialmente destruirá por completo el argumento comercial para que el H2 sea utilizado en la producción de acero ecológico.
Boston Metal, con sede en Massachusetts, ha inventado una tecnología que llama electrólisis de óxido fundido (MOE, por sus siglas en inglés) que explota un electrolito líquido que contiene trozos de mineral de hierro con grandes cantidades de electricidad limpia, calentándolo a 1.600 °C (el punto de fusión del hierro) a través de un electrodo capaz de soportar temperaturas tan altas.
A esta temperatura, el óxido de hierro del mineral se divide en hierro fundido puro y oxígeno; impurezas como sílice y magnesio suben a la parte superior del horno y el electrolito líquido permanece in situ para continuar el proceso.
Otra ventaja de la tecnología es que, si bien la reducción directa de hierro (DRI) alimentada con hidrógeno requiere escaso mineral de hierro de alta ley, el MOE trabaja con hierro de baja calidad, un recurso más barato.
Boston Metal ya opera una planta piloto en su sede en Woburn, Massachusetts, y esta semana abrirá una fábrica a escala comercial en Brasil que producirá aleaciones de hierro bajas en carbono, que la compañía cree que puede generar 400 millones de dólares de ingresos para 2026, año en que espera comenzar a fabricar acero verde comercialmente, según la revista Forbes .
Boston Metal ha estado bien financiado, trabajando en tecnología MOE desde su formación en 2013, y el potencial de la empresa es tan grande que ha seguido atrayendo inversores de alto perfil.
Breakthrough Energy Ventures, la firma de capital de riesgo tecnológico financiada por multimillonarios como Bill Gates, Jeff Bezos y Richard Branson, fue uno de los primeros patrocinadores financieros de Boston Metal y continúa apoyando a la compañía, contribuyendo en septiembre pasado con una cantidad no revelada.
La base de datos de capital riesgo Pitchbook valoró recientemente la empresa en 860 millones de dólares, según Forbes .
Otro inversor de Serie C fue el gigante siderúrgico ArcelorMittal, que recibirá 2.890 millones de euros de los gobiernos europeos para construir instalaciones de DRI, a pesar de que su jefe europeo admitió recientemente que el hidrógeno verde era demasiado caro para utilizarlo en sus acerías de la UE.
Las estimaciones sugieren que el acero verde a base de hidrógeno será entre un 20% y un 40% más caro que el acero gris fabricado con altos hornos de carbón y hornos básicos de oxígeno.
Pero el director general de Boston Metal, Tadeu Carneiro, dijo a Forbes que su tecnología permitiría que la producción de acero verde alcanzara la paridad de costos con la variedad altamente contaminante una vez que las plantas del MOE produzcan entre uno y dos millones de toneladas al año, con precios de electricidad de alrededor de 30 dólares por MWh, una cifra que ya está alcanzando la energía solar en las zonas más soleadas del mundo.
Sin embargo, muchos compradores han estado dispuestos a pagar una prima por el acero verde derivado del hidrógeno. Por ejemplo, H2 Green Steel ya ha firmado acuerdos de compra vinculantes con Mercedes-Benz, Porsche, el fabricante de camiones Scania, el conglomerado estadounidense Cargill, la empresa alemana de tecnología automotriz ZF, el proveedor alemán de repuestos para automóviles Kirchhoff Automotiv, el fabricante italiano de acero Marcegaglia, la británica SPM y El Grupo Bilstein de Alemania.
Reemplazar el acero gris fabricado con carbón por la variedad verde, más cara, costará alrededor de 300 euros (326 dólares) por automóvil, según estimaciones, un aumento que puede ser absorbido con bastante facilidad por los clientes que ya pagan cinco cifras por vehículos nuevos.
La tecnología MOE de Boston Metals también se puede utilizar para producir metales con bajas emisiones de carbono distintos del hierro y el acero. En noviembre, el gobierno de Estados Unidos otorgó fondos para permitir a Boston Metal construir una nueva instalación en Virginia Occidental para fabricar cromo ultrapuro. No se reveló el monto exacto de la financiación, pero el proyecto fue uno de los siete que compartieron un fondo de efectivo de 275 millones de dólares.
Fuente: Hydrogen Insight
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