El colectivo Alcalá Acoge recuerda al equipo de gobierno municipal que los "MENAs" son las víctimas, no los agresores
Respuesta ante la moción finalmente retirada por VOX, para dejar constancia de lo que no se está haciendo respecto a las personas del colectivo migrante y el odio hacia los niños no acompañados y la casa de acogida expresados en la moción presentada en el Pleno municipal del 16 de julio de 2024.
16 julio 2024.- Una vez más estamos aquí, la asociación Bienvenidxs Refugiadxs Alcalá de Henares y el colectivo Alcalá Acoge, esta vez con más conocimiento que antes, más experiencia que antes y la seguridad de que las propuestas excluyentes del odio no pasarán.
Leída la lista de acusaciones falsas, nuevos escenarios apocalípticos, peligros inminentes que no se materializan en meses, alarma social invisible, etc. es evidente que no hay ninguna preocupación por el servicio a la ciudadanía, sino un afán de colocar en las mentes de quienes les sigan una idea falsa, para cubrir sus intereses. Por eso, en lugar de discutir el mismo discurso dictado desde lugares diferentes a Alcalá de Henares, nos dirigimos a quienes dicen representar a la población, como parte de un sistema constitucional.
Las instituciones están para proteger a la ciudadanía, ese es un principio democrático. En el caso de las instituciones municipales, su labor es proteger al vecindario, por ejemplo facilitando el empadronamiento de quienes viven en la ciudad, para que puedan ser atendi d @s en situaciones de urgencia médica o social. Cuando toda persona está obligada a inscribirse en el padrón del sitio en que reside, no facilitar dicho empadronamiento supone hacer dejación de esa promesa por la que se les vota.
No parece lógico que se permita faltar a sus deberes a quienes están en el gobierno municipal. El ayuntamiento debe proteger más aún a quienes están más desprotegidos, quienes son más vulnerables. Si quienes forman dicho gobierno y las personas que son afines a su ideario transmiten pensamientos que no soportan un mínimo análisis, están haciendo algo que George Orwell llamó “pensamiento doble”: repetir algo que se ha escuchado previamente, aunque se sabe que es falso. Quienes mienten son culpables; pero quienes mantienen la mentira lo son también. Por ejemplo: si no se desmienten las acusaciones de que los niños migrantes no acompañados sean delincuentes, la extensión del prejuicio es imparable, y cuanta más responsabilidad política se tiene, más necesario es actuar contra ese abuso.
Que los niños migrantes no acompañados tienen una situación vulnerable es evidente por las acusaciones falsas que reciben. Si fueran personas con plenos derechos, podrían denunciar a quienes los difaman. En cambio, reciben odio gratuito, vivan donde vivan; pero la campaña últimamente se ha centrado en los adolescentes que residen en la casa de acogida localizada en un barrio de Alcalá y en quienes se ocupan de ellos, a pesar de la labor que están realizando de dignificación, acompañamiento y ayuda.
Esos proyectos son los que deberían proliferar en ciudades como la nuestra, en la que hay muchos más migrantes menores de edad de lo que se quiere reconocer y no se les pone inmediatamente bajo la tutela de la Comunidad de Madrid, que es la institución que debería protegerlos situándolos en los centros de Acogida de Menores. En Madrid hay dos y tienen condiciones muy duras.
Los fondos del Estado que reciben las Comunidades Autónomas deberían utilizarse también para mejorar esas condiciones extremadamente difíciles que van a aumentar, porque, lo quieran ver o no, no se puede apartar y encerrar a estos miles de seres humanos que llegan a Europa en uno solo de los territorios del Estado. Hay que ponerse manos a la obra para lo que dicta el sistema democrático: proteger a las personas más vulnerables, cumplir la Declaración de los Derechos del Niño.
El aumento de proyectos como la casa de acogida de menores, que preserva a quienes la habitan del peligro de estar mezclados con adultos de diferentes nacionalidades, con escasa atención psicosocial y legal, como sucede en el CAED, sería equivalente al reparto de l@s niñ@s por todo el territorio nacional, de manera que se liberen espacios atestados, en los que no es posible atenderlos correctamente. Este hacinamiento sí puede provocar problemas de convivencia.
En Alcalá, donde no hay un solo recurso habitacional humanitario, deberíamos tener pequeños proyectos similares y no solo para los menores migrantes. Las posibilidades de construir un futuro propio se multiplican cuando las personas son tratadas con dignidad y ese futuro puede formar parte de una sociedad que contribuirán a mejorar, como ha ocurrido siempre con la inmigración.
En cuanto a la propuesta de esta moción, que pide la Implementación de un plan efectivo de “repatriación”, es decir, deportación de los menores extranjeros no acompañados con sus padres en sus países de origen, preguntamos a quienes tienen que votarla ¿Y si no tienen padres con los que volver? ¿Si las causas de que hayan venido hasta aquí en un viaje mortal son precisamente sus padres, por su abandono, trato violento o acoso? ¿Si sus países están en guerra? ¿Si sus padres no pueden mantenerles, porque se quedaron sin sustento, sin tierra que trabajar, robada por facciones rebeldes, sin pesca que les dé un sueldo, porque les estamos esquilmando la pesca, sin casas porque el mar se ha adentrado en las costas a consecuencia del cambio climático?
Podríamos poner nombres y apellidos a cada una de estas posibilidades. Cada persona tiene una casuística y eso ya invalida la pretensión de tomar una medida urgente. En todo caso, estas personas ya fueron expulsadas. Tuvieron que huir debido a los problemas causados por la precariedad en estos países, que llevan a la delincuencia por parte de autoridades que corrompen los vínculos comunitarios y las normas sociales, haciendo de sus entornos de vida y relaciones lugares cada vez más irreconocibles. Al voluntariado de Alcalá Acoge nos avergüenza que Europa esté mucho más cerca de la causa que de su solución.
La segunda propuesta dice: “Cualquier inmigrante que entre de manera ilegal en España nunca podrá regularizar su situación en nuestro país ni recibir ningún tipo de ayuda pública.” Coherente para quien lo propone; pero ¿coherente para quien votó a favor de revisar la proposición de iniciativa popular conocida como “Regularización ya”?
Afortunadamente, gentes que vinieron de lejos pudieron regularizar su situación, hacer su vida aquí y formar familias, a las que pertenecen personas como Mohamed Attaoui, Majida Maayouf, Ayad Lamdassem, Ray Zapata, Ansu Fati, Ana Peleteiro, Iñaki Williams, Salma Paralluelo, Niko Williams, Lamin Yamal ...
Cuando ganan medallas para España y lloran al escuchar el himno nacional, ¿qué se les pasa a ustedes por la cabeza?
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