neurociencia, ondas sonoras, depresión, ansiedad, psiquiatría, TEPT
Una terapia pionera con ondas sonoras que se dirige al centro de control emocional del cerebro ha mostrado resultados poderosos en la reducción de los síntomas de depresión, ansiedad y trastorno de estrés postraumático (TEPT) , todo sin cirugía ni medicación.
02 mayo 2025.- En un ensayo clínico reciente en UT Austin, los pacientes se sometieron a tratamientos diarios de ultrasonido no invasivo durante tres semanas y experimentaron mejoras significativas en la salud mental, lo que señala una nueva y audaz frontera para la atención psiquiátrica.
Terapia con ondas sonoras para los trastornos del estado de ánimo
Las personas que viven con depresión, ansiedad y trastornos relacionados con traumas experimentaron un alivio significativo tras recibir un nuevo tratamiento cerebral no invasivo que utiliza ondas sonoras para estimular suavemente áreas profundas del cerebro. La investigación, realizada por la Facultad de Medicina Dell de la Universidad de Texas en Austin, destaca una alternativa prometedora a las intervenciones psiquiátricas tradicionales.
Publicado en Molecular Psychiatry , el estudio muestra que el ultrasonido enfocado de baja intensidad puede apuntar de manera segura y precisa a la amígdala, una estructura cerebral a menudo hiperactiva en los trastornos del estado de ánimo y de ansiedad, sin la necesidad de cirugía o medicación.
Modulación cerebral revolucionaria no invasiva
“Los participantes mostraron mejoras notables en diversos síntomas tras tan solo tres semanas de tratamientos diarios”, afirmó el Dr. Gregory Fonzo, autor principal del estudio y profesor adjunto del Departamento de Psiquiatría y Ciencias del Comportamiento de Dell Med. “Lo revolucionario de este enfoque es que es la primera vez que logramos modular directamente la actividad cerebral profunda sin procedimientos invasivos ni medicamentos”.
En el ensayo doble ciego, 29 personas con trastornos del estado de ánimo y ansiedad se sometieron a tratamientos de ultrasonido guiados por resonancia magnética dirigidos a la amígdala izquierda. La terapia produjo reducciones inmediatas en la actividad amigdalina. Tras tres semanas de tratamiento, los pacientes reportaron mejoras clínicamente significativas en la depresión, la ansiedad, los síntomas de TEPT y el malestar emocional general.
Durante décadas, la amígdala ha sido un objetivo de interés, pero su acceso ha requerido cirugía cerebral o abordajes indirectos mediante estimulación cortical. Esta tecnología abre una nueva frontera en el tratamiento psiquiátrico, ofreciendo potencialmente alivio a pacientes que no han respondido a las terapias tradicionales.
El tratamiento fue bien tolerado y no se produjeron efectos adversos graves, lo que sugiere un perfil de seguridad prometedor a medida que los investigadores avanzan hacia ensayos clínicos más amplios.
Fuente: “Low-intensity transcranial focused ultrasound amygdala neuromodulation: a double-blind sham-controlled target engagement study and unblinded single-arm clinical trial” by Bryan R. Barksdale, Lauren Enten, Annamarie DeMarco, Rachel Kline, Manoj K. Doss, Charles B. Nemeroff and Gregory A. Fonzo, 24 April 2025, Molecular Psychiatry. DOI: 10.1038/s41380-025-03033-w
COMENTARIOS