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Muchos niños de hoy vivirán una vida sin precedentes debido al cambio climático. Imagen: Spencer Platt/Getty |
Los jóvenes estarán expuestos a una serie de olas de calor que nadie habría experimentado en la época preindustrial.
08 mayo 2025.- Poco más de la mitad de los niños nacidos en 2020 se enfrentarán a una exposición sin precedentes a olas de calor a lo largo de su vida, incluso según una proyección conservadora de cómo se desarrollará el cambio climático en los próximos 75 años.
La cifra aumenta al 92% de los niños de cinco años de hoy si se cumplen las predicciones climáticas más pesimistas, y se compara con apenas el 16% de las personas nacidas en 1960 bajo cualquier escenario climático futuro.
Los hallazgos, publicados en Nature, destacan la carga desproporcionada que el cambio climático supone para los jóvenes de hoy y la necesidad de limitar el calentamiento global para salvaguardar a las generaciones futuras.
“Mucha gente de mi edad tiene hijos, niños pequeños, y es especialmente para ellos que las proyecciones parecen muy sombrías”, dice el coautor del estudio Wim Thiery, científico del clima de la Universidad Vrije en Bruselas, que nació en 1987.
Fuente: Ref. 1
Que los niños y jóvenes serán los más afectados por el cambio climático no es una idea nueva. Sin embargo, el último estudio es uno de los primeros en identificar las generaciones y el número de personas que experimentarán una "vida sin precedentes" en términos de calor extremo, afirma Thiery.
Los investigadores lo definen como un umbral de exposición a fenómenos meteorológicos extremos a lo largo de la vida que una persona que viviera en un mundo sin cambio climático tendría solo una probabilidad entre 10.000 de experimentar.
«Si se supera ese límite, es prácticamente imposible experimentar tantos fenómenos climáticos extremos si no hubiera habido cambio climático», afirma Thiery.
Thiery y sus colegas utilizaron modelos climáticos para establecer el umbral para diferentes regiones y tipos de clima, incluyendo olas de calor, inundaciones e incendios forestales. Para Bruselas, por ejemplo, el umbral considerado sin precedentes para el calor fue el de haber experimentado seis olas de calor extremas, eventos que, en promedio, ocurrirían solo una vez al siglo sin el cambio climático.
Luego utilizaron datos demográficos para calcular, para una serie de generaciones nacidas entre 1960 y 2020, en todo el mundo, la fracción de cada generación que alcanzaría ese límite a lo largo de sus vidas, y cómo eso variaría con diferentes escenarios de calentamiento global.
Calor en el horizonte
La proporción de cada generación que se prevé que experimente una "vida sin precedentes" en términos de exposición al calor varió enormemente. De los 81 millones de personas nacidas en todo el mundo en 1960 —que ahora rondan los sesenta y cinco—, solo 13 millones, o el 16 %, alcanzarían este umbral de exposición a lo largo de su vida, independientemente del escenario climático.
Sin embargo, de los 120 millones de niños nacidos en 2020, 58 millones (alrededor del 50 %) experimentarían este nivel de exposición, incluso en el escenario más optimista propuesto por los investigadores, de 1,5 °C de calentamiento por encima de las temperaturas preindustriales para 2100. La fracción de niños actuales de cinco años que experimentan una exposición sin precedentes a las olas de calor a lo largo de su vida asciende al 92 % (unos 111 millones de personas) en el escenario climático más pesimista, de 3,5 °C de calentamiento.
Los investigadores también descubrieron que el impacto del cambio climático en los niños de hoy no se distribuía de forma uniforme: la probabilidad de una exposición sin precedentes a olas de calor a lo largo de la vida era mayor entre las poblaciones con mayor privación. «No se trata solo de una desigualdad intergeneracional, sino también de una desigualdad entre personas con mayor o menor vulnerabilidad», afirma Thiery.
"Son más claros que en el pasado sobre el impacto directo del cambio climático en los niños", dice Caroline Hickman, psicoterapeuta de la Universidad de Bath, Reino Unido, que ha documentado la ansiedad de los jóvenes sobre el cambio climático .
Existe una tendencia entre las generaciones mayores a ignorar el cambio climático porque no enfrentan los mismos riesgos, afirma, y este estudio podría ayudar a cambiarlo. «Los adultos deben proteger y preservar la vida de los niños, y estamos incumpliendo nuestro deber de cuidarlos si no lo tomamos en serio».
Emma Lawrance, quien estudia salud mental y cambio climático en el Imperial College de Londres, afirma que, además de abandonar los combustibles fósiles lo antes posible para limitar el cambio climático, es importante que las comunidades implementen cambios para proteger a las futuras generaciones del calor, plantando árboles que den sombra, mejorando las viviendas y proporcionando espacios frescos donde las personas puedan refugiarse durante las olas de calor. "Necesitamos preparar a las comunidades para afrontar un número cada vez mayor de estos eventos", afirma.
Fuente: Grant, L., Vanderkelen, I., Gudmundsson, L. et al. Global emergence of unprecedented lifetime exposure to climate extremes. Nature 641, 374–379 (2025). https://doi.org/10.1038/s41586-025-08907-1
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