geociencia, volcanes, Afar, valle del Rift, geología
![]() |
Flujos de lava activos que emanan del volcán Erta Ale en Afar, Etiopía. Fuente: Dr. Derek Keir, Universidad de Southampton/Universidad de Florencia |
01 julio 2025.- En las profundidades de la falla de Afar, en Etiopía, los científicos han detectado oleadas rítmicas de roca del manto fundido: latidos geológicos lo suficientemente potentes como para adelgazar la corteza terrestre, separar África y sembrar un futuro océano.
El corazón geológico de África late con un ritmo inesperado. En el Afar, un punto donde convergen las placas Nubia, Arabia y Somalia, investigadores han descubierto pulsos rítmicos de manto fundido que adelgazan la corteza y marcan el compás de la futura separación continental.
Latidos del manto bajo Afar
Un equipo internacional, liderado por Emma Watts (University of Southampton y Swansea University), analizó más de 130 muestras de rocas volcánicas recientes del Afar y del Rift Etíope Principal. La composición química de esos basaltos revela franjas recurrentes —“códigos de barras” geológicas— que delatan oleadas de material parcialmente fundido ascendiendo desde lo profundo del manto terrestre.
Al integrar estos datos geoquímicos con perfiles sísmicos y parámetros tectónicos, los científicos proponen que un solo penacho de manto, asimétrico y composicionalmente variable, alimenta las tres ramas del rift. Las pulsaciones se canalizan de forma más eficiente donde la placa es más delgada y el desgarro más rápido, como ocurre en el brazo del Mar Rojo.
Flujos de lava basáltica reciente en la región de Afar, Etiopía. Fuente: Dr. Derek Keir, Universidad de Southampton/Universidad de FlorenciaPlacas que marcan el pulso
La investigación muestra que la dinámica de las placas superpuestas no es un factor pasivo. La velocidad de extensión y el espesor de la litósfera condicionan la frecuencia y amplitud de las oleadas. En los rifts de mayor extensión, las pulsaciones fluyen de modo regular, semejantes a un pulso sanguíneo en una arteria estrecha, mientras que en ramas más lentas el flujo se dispersa y se vuelve menos uniforme.
Hace millones de años, procesos semejantes separaron Gondwana y dieron origen a océanos como el Atlántico. En Afar, el adelgazamiento continuo de la corteza, impulsado por estos latidos del manto, prepara el terreno para que, en un futuro remoto, el valle se hunda y sea inundado por aguas marinas, inaugurando un nuevo océano.
Este hallazgo redefine nuestra comprensión de la formación de cuencas oceánicas y de la interacción entre los mantos profundos y la tectónica de placas. Al revelar un “corazón” palpitante bajo el Afar, el estudio demuestra cómo las fuerzas profundas de la Tierra pueden dar forma a la geografía futura del planeta.
Vista del Gran Rift Etíope, tomada desde el volcán Boset, Etiopía. Fuente: Prof. Thomas Gernon, Universidad de SouthamptonEl Dr. Derek Keir, profesor asociado de Ciencias de la Tierra en la Universidad de Southampton y la Universidad de Florencia, y coautor del estudio, afirmó: «Hemos descubierto que la evolución de las surgencias del manto profundo está estrechamente ligada al movimiento de las placas que lo cubren. Esto tiene profundas implicaciones en nuestra interpretación del vulcanismo superficial, la actividad sísmica y el proceso de desintegración continental».
El trabajo demuestra que las surgencias profundas del manto pueden fluir bajo la base de las placas tectónicas y ayudar a concentrar la actividad volcánica donde la placa tectónica es más delgada. La investigación posterior incluye comprender cómo y a qué ritmo se produce el flujo del manto bajo las placas, añadió Keir.
Fuente: “Mantle upwelling at Afar triple junction shaped by overriding plate dynamics” by Emma J. Watts, Rhiannon Rees, Philip Jonathan, Derek Keir, Rex N. Taylor, Melanie Siegburg, Emma L. Chambers, Carolina Pagli, Matthew J. Cooper, Agnes Michalik, J. Andrew Milton, Thea K. Hincks, Ermias F. Gebru, Atalay Ayele, Bekele Abebe and Thomas M. Gernon, 25 June 2025, Nature Geoscience. DOI: 10.1038/s41561-025-01717-0
COMENTARIOS