economía, alimentación, flota pesquera
El acuerdo alcanzado esta madrugada en el Consejo de Ministros de la UE frena la tendencia histórica de reducciones y permite a los pescadores españoles mantener 143 días de faena, condicionados a la adopción de medidas ecológicas y de selectividad.
13 diciembre 2025.- Tras una maratoniana jornada de negociaciones que se ha prolongado hasta la madrugada de este sábado, los ministros de Pesca de la Unión Europea han cerrado el acuerdo sobre los Totales Admisibles de Capturas (TAC) y cuotas de cara a 2026. El pacto trae un respiro vital para el sector pesquero español: se detiene la sangría de recortes en el Mediterráneo.
Por primera vez en años recientes, España ha logrado evitar la reducción automática del esfuerzo pesquero propuesta por la Comisión Europea. El acuerdo final permite a la flota de arrastre del Mediterráneo mantener el mismo nivel de actividad que en la campaña anterior, fijado en un máximo de 143 días de pesca por barco, siempre que se cumplan estrictos criterios de sostenibilidad.
Las claves del acuerdo
El pacto alcanzado en Luxemburgo se basa en tres pilares fundamentales que equilibran la rentabilidad económica del sector con la necesaria recuperación biológica de las especies:
1. Freno a los recortes automáticos. Frente a la propuesta inicial de Bruselas, que sugería nuevas disminuciones en las jornadas de trabajo para alcanzar los objetivos de Rendimiento Máximo Sostenible (RMS), la delegación española ha logrado demostrar que las medidas de conservación actuales ya están dando frutos. Esto ha permitido "congelar" el contador en 143 días, garantizando la viabilidad socioeconómica de cientos de familias en los puertos del Levante y Andalucía.
2. Días de pesca a cambio de sostenibilidad (Mecanismo de Compensación).
El mantenimiento de estos días no es gratuito. Para acceder a la cuota completa de 143 días, los barcos deberán acogerse al llamado "mecanismo de compensación". Esto significa que el sector deberá adoptar medidas técnicas de selectividad, tales como:
El uso de redes con mallas de mayor tamaño o formas específicas (malla cuadrada) que permitan escapar a los peces inmaduros (juveniles).
El respeto a vedas temporales en zonas de cría.
Aquellas embarcaciones que no adopten estas mejoras tecnológicas verán reducidos sus días autorizados de pesca.
3. Un cambio de paradigma. Este acuerdo marca un punto de inflexión en la aplicación del Plan Plurianual del Mediterráneo. Se reconoce que la recuperación de los stocks (como la merluza o la gamba roja) puede lograrse mediante una pesca más inteligente y selectiva, y no exclusivamente mediante la prohibición de salir a faenar.
Valoración del impacto
Para el sector pesquero español, este resultado aporta estabilidad y certidumbre de cara a 2026. Aunque el sector siempre aspira a recuperar días perdidos en el pasado, evitar un nuevo recorte del 3% o 6% (cifras que se barajaban al inicio de la negociación) se considera un éxito defensivo que protege el empleo directo en las zonas costeras.
El acuerdo entrará en vigor el próximo 1 de enero de 2026, momento en el cual la flota deberá tener listos sus planes de selectividad para poder hacer uso de la totalidad de las jornadas asignadas
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